26º Período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos
Debate sobre el Informe de la Relatora Especial sobre la extrema pobreza y los derechos humanos sobre política fiscal A/HRC/26/28
Palais de Nations, Jueves 12 de junio de 2014
Declaración presentada por Nicole Bidegain, DAWN, en representación de Righting Finance en el 26º Período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos
Mi nombre es Nicole Bidegain, pertenezco a Mujeres por un Desarrollo Alternativo para una Nueva Era (DAWN, por sus siglas en inglés), y me dirijo a ustedes en representación de la Iniciativa Righting Finance. Acogemos con satisfacción el informe sobre tributación y derechos humanos, ya que establece la conexión entre la realización de los derechos humanos y la necesidad de maximizar la recaudación de recursos de todas las fuentes posibles.
Valoramos el enfoque equilibrado del informe al reconocer que la recaudación de impuestos adecuada no corresponde únicamente a la política nacional, sino que requiere un entorno internacional propicio de conformidad con las obligaciones de la cooperación internacional en materia de derechos humanos.
La aplicación del principio de igualdad y no discriminación a la tributación implica desplazar la carga impositiva al consumo que pagan las mujeres, las personas que viven en la pobreza y otros grupos afectados por la discriminación estructural, como las personas gays, lesbianas y trans que se encuentran en la parte inferior de la distribución del ingreso, hacia sistemas tributarios progresivos, incluidos los sectores altamente rentables y los actores económicos que actualmente pagan menos impuestos de los que deberían.
En esta línea, apoyamos las recomendaciones de:
• Garantizar que el ingreso público recaudado del sector financiero sea proporcional a la rentabilidad del sector y a los riesgos que genera, incluyendo pero sin limitarse a la aplicación de un impuesto sobre las transacciones financieras (párrafo 79, n).
• Garantizar que las industrias extractivas estén sujetas a tasas impositivas y derechos de exportación adecuadas y que los derechos humanos de las comunidades afectadas estén protegidos (párrafo 79, l).
En segundo lugar, los gobiernos deben revertir “la carrera a la baja “, y pasar de la competencia a la cooperación impositiva. Hacemos un llamado a los gobiernos a poner en práctica las siguientes recomendaciones del informe para:
• instituir una supervisión pública transparente sobre la concesión y el monitoreo de los incentivos tributarios , y llevar a cabo evaluaciones periódicas sobre (…) el cumplimiento de los derechos humanos, fundamentados por una amplia participación pública, especialmente por las personas que se verán más afectadas; (párrafo 79, j)
• adoptar, un estándar de información desglosada país por país para las empresas transnacionales (párrafo 81, f)), la divulgación completa de los propietarios efectivos de las empresas registradas a través de los registros públicos nacionales; (párrafo 81, g) y el desarrollo de un sistema multilateral, global de intercambio automático de información fiscal (párrafo 81, d).
En tercer lugar, recomendamos que, como parte del mandato del nuevo Relator Especial, los gobiernos reciban apoyo para aplicar las recomendaciones específicas del informe y que los próximos informes desarrollen aún más los vínculos entre la regulación financiera, la tributación y los derechos humanos de las personas que viven en la pobreza.
Para concluir, respaldamos la propuesta de incluir un compromiso para alinear la política fiscal con las obligaciones de derechos humanos como parte del marco de desarrollo post-2015.
Muchas gracias.